Mujer Atómica


La primera vez que tube sexo con ella hubo un terremoto en Santiago, un Tsunami en Bimini y un alúd en Laponia. Cuando me la chupo un tren descarriló en Londes dejando 27.403 heridos y 987 huerfános; el volcán krakatoa entró en erupción y 729 cristianos se convirtieron al islam.
En nuestro segundo encuentro las tragedias se multiplicaron: un incendio en Berlín, un derrumbe en Moscú, un meteorito en Australia y una fuga de gas en Tokio que hizo volar por los aires un hotel de cinco estrellas.
En nuestro tercer encuentro la Interpol detuvo el coito y ambos fuímos arrestados. El mundo ya tenía suficientes problemas, dijieron, una medida preventiva.
Nunca más supe de ella. Le borraron los recuerdos y le implantaron nueva identidad.
Yo por mi lado aún la sigo buscando. El mundo deberá perdonarme, pero una vez y solo una vez en la vida se hace el amor con una mujer atómica.