Historia De Una Pija


Su pija funcionaba como una suerte de radar galáctico. Al menos esas palabras uso para describirme lo que pasaba con su máquina. Decía que cada vez que los extraterrestres intentaban ponerse en contacto la cosa se le llenaba de sangre y se le ponía dura como granito; Esta situación lo estaba volviendo loco, pues a veces esas erecciones podían llegar a durar 15 o 20 horas corridas. El estaba haciendo una importante carrera en el mundo editorial; había publicado dos novelas con amplia aceptación del público intelectual, y sabia que nada habría sido posible sin su pija-satélite aunque ahora ahí estaba, en la guardia del hospital al borde de la necrosis. La información del espacio podría traer los resultados de la corrida de bolsa y hacerlo millonario o dejarlo sin pija para siempre.